El Redoble, es un hostal, con un precio inmejorable. El servicio es muy cercano, familiar y amable. No sé de muchos sitios en los que puedas comer, por 7 euros por persona, con una cocina casera, pero de verdad. Lo de la tarta de queso merecería una mención especial, de hecho si yo fuese critico gastronómico, seguramente podría escribir varias líneas al respecto, pero como no lo soy, sólo diré que es impresionante.

Llevo desde los seis años visitando este pueblo tan encantador y esta zona tan entrañable y tranquila. Ahora sigo visitándolo pero con mi mujer y mi hijo al menos un fin de semana al año, Me da la vida y me ayuda a cargar las pilas. Después de tantos años conservo mis amigos de la infancia de este pueblo, aún qué no consigo verlos a todos pues ya cada uno tiene su vida y trabajo en otros lugares del mapa, pero sin duda no se olvidan aquellos maravillosos años en tierras de Sierra de Gata. El Redoble es mi hotel preferido de toda la zona sin duda, tienes todas las comodidades necesarias y el trato es amigable y familiar, el acceso es inmediato y su cocina impresionante, y bueno, qué decir del vino…lo mejor de lo mejor.

Viajamos 5 amigos y un niño, en una visita relámpago y acabamos de casualidad, salimos contentos tanto por el servicio como por la comida, es un lugar especialista en arroces, que si estaban buenos pero algo mejorable, entrantes bastante buenos, amplia carta de carnes y pescados salvaje de anzuelo, disponen de pan sin gluten y adaptan el menú a dieta sin gluten. Las camareras muy agradables. Postre sin gluten espectacular, si volvemos sin duda repetiremos.

Comedor muy agradable, tanto la dueña como la camarera habitual son muy simpáticas y serviciales. Tienen una carta amplia, con varias sugerencias distintas cada día y una variedad de arroces estupendos. El arroz con pato es una maravilla.